Óscar Iván Zuluaga vuelve a la contienda por la Presidencia de Colombia, luego de ser elegido como el candidato del Centro Democrático para las próximas elecciones. En diálogo con los miembros de ProBogotá expuso su visión del país y aseguró que su experiencia política y compromiso con el país juegan a su favor.

Óscar Iván Zuluaga conversó con los miembros de ProBogotá Región, en el marco de una serie de reuniones que la fundación está sosteniendo con los precandidatos presidenciales para conocer sus planteamientos y su visión sobre Bogotá y el país. El recién elegido como candidato del Centro Democrático para la próxima contienda electoral explicó cuales son los principales desafíos que el país debe enfrentar, tras el paso de una pandemia que, tal como lo reconoce, agudizó los problemas sociales y económicos por los que atravesaba Colombia.

Zuluaga basó su visión del país en tres aspectos fundamentales: recuperar la seguridad; la confianza ciudadana como el bien más preciado de la democracia; y el bienestar de las familias. En este sentido, expuso algunos temas que, según él, son reveladores para entender el país que quedó tras la pandemia, la cual calificó como la causante de la peor crisis de la economía mundial en los últimos 100 años. Primero, señaló que la mayor revelación demográfica del censo de 2018 es que Colombia está en cabeza de la mujer, toda vez que el 41% de los jefes cabeza de hogar, son mujeres; para 2015 este porcentaje era del 23%. No obstante, dijo, la contradicción más grande es que, precisamente, la mujer en Colombia es la más afectada por el desempleo, pobreza y violencia.

La segunda realidad que presentó Zuluaga es que “somos una democracia joven”. Según explicó, el 34% del censo electoral del país está compuesto por jóvenes de entre 18 y 34 años que, si participan electoralmente, podrían definir, no solo el Congreso, sino el presidente de Colombia. Otra realidad a la que hizo referencia el candidato es que “hemos llegado al punto máximo de desigualdades”. Zuluaga considera que hoy esta problemática no solo tiene que ver con la distribución de las riquezas, sino con una profunda desigualdad de género; desigualdad intergeneracional que hace que los jóvenes tengan la mayor tasa de desempleo; brechas regionales, que concentran las oportunidades en las zonas urbanas, creando una brecha “insalvable” con las zonas rurales; y desigualdad sobre el cambio climático que afecta más a personas pobres que, por ejemplo, viven en zonas de alto riesgo.

“Hemos llegado al techo máximo de desigualdades, el país no resiste. A esto sumemos el otro factor y es que los jóvenes y la sociedad en general tienen plena desconfianza de dos instituciones fundamentales para una democracia que son la justicia y la política, y eso es grave porque por esa vía se debilita la democracia y se abre un espacio al populismo de izquierda”, afirmó.

Respecto al tema de seguridad, el candidato del Centro Democrático identificó cuatro “enemigos comunes e interconectados” que, tal y como lo explicó, son actores del crimen que, aunque trabajan de manera independiente, se complementan y se conectan. Estos son: narcotráfico, terrorismo urbano, microtráfico y delincuencia. Por otro lado, Zuluaga reiteró que, si bien considera que los Acuerdos de la Habana son una “impunidad”, desde el punto de vista de política, economía internacional y relaciones internacionales, no es viable desconocerlos.

Aseguró que, de ganar la Presidencia, tendrá un mandato popular y ciudadano en el que convocará un referendo para que los ciudadanos hagan una reforma a la justicia y a la política, como un tema sustancial para luchar contra la corrupción y recuperar la confianza ciudadana. Agregó que le interesa construir una verdadera red de protección y seguridad social para hacer una clara asignación de ayudas y transferencias del Estado que funcione bien en tiempos de crisis, en favor de la población más vulnerable como mayores de 60 años que viven en pobreza, no tienen capacidad de generar empleo, ni se van a pensionar; población en condición de discapacidad total; y hogares y primera infancia en pobreza extrema.

El candidato explicó que se necesita un modelo educativo basado en el entorno laboral y el emprendimiento. Por ello, indicó que hay que hacer una “revolución del grado 10 y 11” llevando al SENA a todos los municipios para que los estudiantes, en esta etapa, hagan doble titulación (bachiller y técnico o tecnólogo) en temas que esté demandando el mercado laboral. Zuluaga también se propone llevar el inglés a los colegios públicos desde la primaria con base en que es necesario “mirar la educación en función del trabajo y el emprendimiento como política central”. Finalmente, expresó que Colombia debe profundizar en un cambio de mentalidad y aprovechar la coyuntura que representa el cambio climático el cual está limitando a muchos países en la producción de alimentos, para convertirse en un actor relevante en exportación de sus productos para el mundo.