Después de una caída inédita en el comportamiento de la mayoría de las conductas delictivas en el 2020, por cuenta de las condiciones especiales de confinamiento a causa del COVID-19, el año 2021 presentó un repunte en los registros, un resultado esperado al reactivarse las dinámicas urbanas de la ciudad.

En 2021 el gobierno de la ciudad afrontó el reto de gestionar los efectos generados por más de 12 meses de confinamiento y los efectos socioeconómicos que se derivaron de la restricción a los derechos individuales de los ciudadanos para el control del contagio y la disminución del riesgo de vida de la pandemia.

El regreso progresivo a la vida urbana enfrentó a la administración distrital a la gestión de problemas cotidianos que se habían invisibilizado en el marco de la crisis o tan solo dejó de atender en un ejercicio de priorización obligatorio a lo largo del 2020.

El resultado de esto fue un deterioro significativo del estado de ánimo de la ciudad que se evidenció en la intensidad de la violencia y el desorden en jornadas de protesta que se desarrollaron por cuenta de factores disparadores externos a la gestión local.

En este reporte se presenta la proyección estratégica de la seguridad, la convivencia y la justicia en Bogotá – Región en 2022, se proponen las claves para la gestión de la seguridad urbana y se plantean alertas tempranas sobre factores de riesgo a la estabilidad.